Para empezar a entrenar en el gimnasio, tendremos que introducir una adaptación física general, no pretendamos ponernos al nivel de los demás jugadores que llevan entrenando más tiempo, esta adaptación podrá tener una duración media de 4 semanas donde con poco peso y muchos ejercicios, acostumbraremos a nuestros músculos, ligamentos y tendones al entrenamiento con cargas.
Después de este periodo, estaremos listos para subir los pesos progresivamente, bajar las repeticiones y empezar a trabajar métodos de fuerza más específicos. Es recomendable seguir una progresión desde ejercicios más analíticos donde aislaremos el músculo que trabaja (en máquinas), a ejercicios que requieran un control muscular y técnica más avanzada (pesos libres). Un buena forma de ir adaptándose al trabajo de fuerza puede ser el entrenamiento en circuito. Consiste en hacer varios ejercicios sin descanso entre sí, una vez lleguemos al último, descansaremos 2-3 minutos y volveremos a empezar.s.
Los ejercicios pueden ir de 6 a 12, y las repeticiones alrededor de 15. Los pesos deben ser bajos (no es bueno llegar al fallo en los ejercicios, es decir, que tenemos que elegir un peso que nos permita terminar con garantías todas las repeticiones), y las vueltas al circuito pueden estar entre 2 y 5. Todos estos parámetros los iremos adecuando a nuestro nivel. En cuanto a los ejercicios escogeremos uno por grupo muscular. Una vez pasado ese primer periodo de adaptación física general, podemos empezar con un método de fuerza algo más específico, donde trabajaremos el cuerpo en su totalidad durante 4 semanas más como mínimo.
En este método dividimos todos los grupos musculares en dos días (A y B), y repetimos cada uno de ellos 2 veces en semana. Las series irán desde 3 a 5, las repeticiones de 8 a 12, y el peso tendrá que ser cómodo, no es recomendable tampoco llegar al fallo porque aún estamos en dando nuestros primeros pasos en el trabajo de fuerza (es bueno tener la sensación de poder hacer una o dos repeticiones más al final de la serie). Los descansos deben ser entre un minuto y medio y dos minutos. Un ejemplo de cómo podría ser:
Entrenamiento A // Pectoral – Dorsal – Tríceps
– Press Banca
– Jalón Polea
– Aperturas con mancuernas
– Remo con mancuerna
– Press Francés
Entrenamiento B // Cuádriceps – Femoral – Hombro – Bíceps – Sentadilla con barra
– Peso muerto
– Press militar
– Elevaciones laterales
– Curl con barra
A partir de aquí, estaremos listos para empezar a entrenar la preparación física específica del rugby, como ya hemos visto en otros artículos, de una forma segura y controlada. Para ser más completos, a este tipo de sesiones podemos añadirles el trabajo de la zona abdominal con 10 minutos al final del entrenamiento y el cardio realizándolo en días separados o al final del entrenamiento en cuestión. Para concluir, podemos decir que hay muchos métodos y formas de empezar la práctica de este deporte, aquí os mostramos solo una visión general de cómo lo podéis hacer. De lo que sí estamos seguros es que, si estamos bien preparados, solo obtendremos beneficios, estaremos mejor físicamente, evitaremos lesiones, nos sentiremos más seguros en el campo y nuestra técnica avanzará más rápidamente.
Mucho ánimo para todos los novat@s!! 😉